Hoy empieza la Cuaresma según el calendario litúrgico, por lo que se ha impuesto la ceniza a todos los alumnos del cole. Mis compañeros de infantil y yo, como en tantas otras ocasiones, hemos tenido el privilegio de iniciar a los pequeñines en esta celebración. Difícil resulta explicarles el significado de la caducidad humana o de la penitencia, pero qué fácil nos ha resultado hablarles de la conversión. Mis niños sólo tienen tres añicos, pero han sabido identificar perfectamente en qué se portan mal y qué deben hacer para ser mejores. Después de expresarlo oralmente, hemos dibujado un muñequito con una cara alegre, como nos ha propuesto el Departamento de Pastoral, lo hemos coloreado y hemos confeccionado con él un collar como símbolo de que "queremos pasar a ser mejores" Por último, en la capilla pequeña, hemos procedido a la imposición de la ceniza. Todo un acontecimiento para ellos.
