En nuestro colegio estamos apostando por las nuevas metodologías y, entre ellas, tenemos especialmente en cuenta el aprendizaje cooperativo. Entendemos que debemos aprovechar al máximo las interacciones que se dan entre los alumnos para favorecer tanto su aprendizaje como su desarrollo cognitivo. Fomentamos el trabajo cooperativo, no sólo para conseguir alcanzar los contenidos del currículum, sino que consideramos el aprendizaje cooperativo como otro contenido en sí mismo. Procuramos desarrollar en nuestros alumnos habilidades necesarias para trabajar en equipo tales como la cooperación, el diálogo, la tolerancia o el saber estar.
Para conseguirlo estamos ideando múltiples actividades. En las clases de cuatro años, por ejemplo, se ha pintado un árbol de otoño por cada grupo base y, a su vez, cada uno de los cinco grupos base ha ayudado a decorar con un color distinto el árbol de sus compañeros. Para todo ello hay que dialogar, ser pacientes, repartir colores: rojo/amarillo/naranja/marrón claro/marrón oscuro, repartir tiempos y espacios, aprender a estar, a convivir y a respetar los diferentes ritmos, preferencias o habilidades de los demás. En definitiva, eso es lo que van a necesitar en su vida.