Qué bonito es esto de pasar con vosotros unos momentos, de que compartáis nuestro día a día, de que ayudéis a la seño y hasta que veáis cómo se queda la clase después de que pase por allí una tarta. Y qué buenos recuerdos les van a quedar a nuestros niños de tantos buenos ratos compartidos.
Quiero pensar que Pablo nunca olvidará este día pero, por si acaso, aquí tiene algunas fotos para el recuerdo.