DANIELA YA TIENE CUATRO AÑITOS

Pues sí, otra princesa, que se nos hace mayor. Le tocó cumplir en un día en el que la seño no daba abasto: gimnasio, fotos de la orla de cinco años, dos niños con diarrea y regalos del día de la madre; pero quiero pensar que ella ni se enteró, y no porque no esté siempre atenta, sino porque la felicidad la embargaba ¡Qué alegría recibir a su mami en clase! A todos los niños les encanta ver a sus padres en el aula, pero cuando las obligaciones laborales lo impiden por completo, la ilusión es todavía más grande. Daniela es muy alta, pero yo diría que el viernes hasta parecía todavía más grande, de ancha que estaba. Hasta pudo compartir bizcocho con su hermano Pablo y abracitos con su querido primo Iván, de la clase de cuatro años,  con el que a diario comparte camino al cole y que su abuelita suele ponerlos en fila antes que a nadie.